Hace 10 años fue la última vez que "nos
visitaron" los Vulturi…Hace 3 años deje de crecer…
Hace 2 años que no veo a Jacob Black…
Hace un año que soy novia de Nahuel y…
Hace 2 años que no veo a Jacob Black…
Hace un año que soy novia de Nahuel y…
Dentro de 2 semanas me caso con él…y aunque lo
amo, hay algo que no me deja estar tranquila… algo que me corta la respiración y
no me deja dormir… ¿Me estaré equivocando?
Renesmee
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¿SECRETO EN LA MANADA?
Original de Kokoro Black
Renesmee POV
Me colgué de su cuello con un solo movimiento. No me importaba el dolor en mi
tobillo, no me importaba que me viera en ropa interior. Mi cuerpo pedía a gritos
su cuerpo. Rodeó mi cintura con sus brazos y me acercó a su cuerpo que irradiaba
más calor que nunca. Empecé a sentir que su mano bajaba cada vez más hasta que
llego a mi ropa interior. Se detuvo.
—¿Nessie que estas…
—No digas nada… es que…— Me sonroje aun más de lo que estaba. Tenía tanta
pena en mi interior. Mi cuerpo quería estar cerca de él. Me pedía sus besos y
sus caricias. Tenía miedo de que este mismo lo rechazara como la vez pasada,
pero tenía la sensación de que eso no sucedería… mi cuerpo gritaba su nombre
¡Jacob! —no pude soportarlo más…— contesté tímidamente.
Mis labios se entreabrieron un poco, invitando a los suyos a pasar. Él se
acercó a mí y mi respiración volvió a agitarse. —Nessie no necesitas decir nada
más—susurró y así sin más… se tiró a mis labios.
Rápidamente mis labios correspondieron a sus apasionados besos, mis dedos
buscaron su cabello, sus manos bajaron y acariciaron mis piernas y glúteos.
Sentía una corriente eléctrica recorriéndome y obligándome a arquear mi
espalda.
De un movimiento y sin dejar de besarme me colocó en sus brazos, cargándome.
Yo volví a enredar mis dedos en su hermoso pelo, simplemente me fascinaba. Con
mucha sutileza me colocó en la cama. Él se colocó arriba de mí y con mucho
cuidado siguió comiéndome a besos. Su lengua pasó a mi boca, yo la recibí con
gloria y en recompensa le obsequié la mía. Al parecer a él también le gustó. La
verdad es jamás me había sentido de esa forma con Nahuel. Creo que siempre supe
que Jake sería el único que despertara esos deseos en mí. Por fin creí que ya no
tenía miedo de estar a su lado, en realidad no lo sabía pero ya no me importaba,
solo deseaba estar a su lado y disfrutar de sus besos y sus caricias, más que
cualquier otra cosa. Sin lugar a dudas no intentaría nada estúpido que pudiera
arruinar el perfecto momento que vivíamos juntos. Él y yo tirados en la cama,
besándonos, tocándonos… amándonos. Así era todo perfecto. No podía pedir nada
más. Nos besamos por un largo tiempo. Hasta que se nos acabó el aire y nos
separamos un poco.
—Te amo— dijo mostrando su hermosa sonrisa, mientras seguía acariciando mi
cuerpo.
—Y yo a ti— le respondí con otra sonrisa.
Pasaron ya dos días en los cuales yo me había sentido como una diosa, pues lo
que yo decía era la ley de Jacob. No me dejaba levantarme ni hacer nada brusco.
La verdad es que el tobillo ya no me dolía y ya no estaba inflamado; aun así
Jake no me dejaba mover ni un dedo y jamás me dejaba sola más que para tomar mis
duchas o para ir al baño. Habíamos platicado muchísimo esos días pero siempre
evitábamos los temas "Nahuel y Leah" por más que obvias razones. Él y yo nos
habíamos dedicado simplemente a ser felices ¿Tenía eso algo de malo? No lo
sabía, ni me importaba.
Además de platicar, jugábamos cartas, mirábamos películas, comíamos a
montones, contábamos chistes, nos besábamos y habíamos estado durmiendo juntos
estos días. Era como si fuéramos una pareja de recién casados. Exceptuando que
aun no había pasado "nada" entre nosotros. Ni siquiera lo habíamos intentado.
Quizás los dos teníamos miedo, la verdad es que no estaba segura ya que ninguno
de los dos se había atrevido a tocar el tema.
Terminé de abrir los ojos para ver que Jake seguía dormido a mi lado, tan
dulce y tan hermoso, que seguía sin poder creer lo feliz que este me hacía solo
por estar ahí aun lado de mí. Me levanté con cuidado para no despertarlo. Me
sentía entumida de lo que casi no había movido las piernas en estos días.
Decidí hacer el desayuno y bajé a la cocina. Abrí el refrigerador y me
percaté que prácticamente no había nada en le refrigerador, lo cual no me
extrañaba, Jake vivía solo así que solo había comida para una persona y
considerando lo que nos habíamos comido en los pasados dos días era más que
lógico que se acabara. Decidí ir a traer comida al mercado. Subí al cuarto,
saqué ropa -cuidando mucho de no despertar a Jake-, fui al baño y rápidamente me
arreglé. Bajé a la cocina y busqué las llaves de mi mustang, Jake las había
dejado en uno de los cajones. Abrí la cochera, saqué mi auto y me dirigí al
mercado.
Suspiré. Era oficial. Ahora sí que me sentía como recién casada en el mercado
pensando en lo que le prepararía a su esposo. Me reí de mí misma mientras echaba
los tomates al carrito.
—¿Nessie? ¿Eres tú?
Giré para ver quién me llamaba. Era Seth Clearwater.
—¡Hola Seth!— sollocé y corrí a abrazarlo, en verdad que lo extrañaba. —¿Cómo
has estado?
—Bien, bien.
—¿De compras?
—No exactamente, solo vine por un refresco,
—¡Oh! Ya veo. ¡Pero que gusto me da verte!
—Y a mi también Nessie.
—¿No te gustaría acompañarnos a mí y a Jake a desayunar?, vine a comprar el
mandado.
—¿Comprar el mandado? ¡No me digas que ya se reconciliaron! ¿Ya viven juntos?
¡WOW! ¿Por qué no nos lo habían dicho? ¡Ya hasta eres la mujer de Jake!
Por un momento me sentí apenada, porque aunque ya nos habíamos reconciliado,
Jake y yo no vivíamos juntos y aun no le daba una respuesta.
—Mas o menos es… complicado.
—Bueno, no me gusta entrometerme en sus vidas, perdón.
—No te disculpes que tú no has hecho ni dicho nada malo, solo no preguntes
nada ¿OK?
—Está bien, mi boca está sellada… menos para comer lo que prepares.
—Está bien, acompáñame a terminar las compras.
—OK.
Seth y yo platicábamos mientras recorríamos los pasillos del mercado,
llenando el carrito hasta el tope. ¡La mujer de Jake! Sí, tal vez sí lo era. La
mujer de Jake. Tenía ese pensamiento en la cabeza dando vueltas, mientras que
tenía una sonrisa tonta por toda mi cara.
—Ya deja de estar pensando en tus cochinadas con Jake.
Inmediatamente volví a la tierra. Mis mejillas estaban coloradas…
—¡Cómo eres tonto!— le saqué la lengua y me seguí derecho con el carrito,
sonriendo.
Terminamos las compras y Seth me ayudó a subir todo al mustang. Nos subimos y
nos dirigimos a la casa de Jake. Al dar la vuelta en la calle de la casa de
Jacob, alcancé a ver que estaba en la puerta, con el pelo todo desmarañado, los
brazos cruzados, y en cuanto nos vio noté como se relajó su cuerpo y hasta dejó
caer los brazos. ¿Qué pasaba con Jake? Nos estacionamos frente a la casa, y él
en seguida se acercó para abrirme la puerta.
—Tonta por un momento pensé que te habías ido, ya casi me iba a buscarte.
—No seas tonto, ¿Cómo iba a dejarte no más así?
Pobrecito de mi Jake, con razón tenía esa cara de angustia. Me acerque a él,
le tomé su rostro y le dejé ver que solo había ido el mercado, y después cambié
la imagen a la noche que me había vendado, donde nos besábamos y nos decíamos
que nos amábamos. Una sonrisa se dibujó en su rostro. Dejé de mostrarle imágenes
y me puse de puntitas para tratar de alcanzarlo mejor y me entregué a sus
labios, haciéndole saber que nunca más me iría y que ahora solo vivía para
el.
—¡Hey! ¡Hey, tortolos! Todavía estoy aquí ¿eh? Si quieren me voy…
—Lo siento Seth— dijimos al unísono, nos volteamos a ver y nos empezamos a
reír.
—Me da gusto verte feliz, Jake.
—A mi también…— respondió Jake mientras me tomaba de la cintura acercándome
aun más a su cuerpo.
Ya adentro de la casa, acomodamos el mandado y preparé el desayuno a toda
prisa porque había casa llena, Seth llamó a Quil y a Embry, así que en cuestión
de una hora tenía la casa llena de licántropos hambrientos y si no quería que me
comieran a mí tenía que esforzarme y preparar mucha comida para todos. Me sentía
tan feliz de volver a verlos. A nadie parecía incomodarle mi presencia, con
decir que si hubiera estado el pesado de Paúl no me hubiera importado. Ellos
eran mi segunda familia, había crecido con todos ellos, me conocían desde niña y
todos y cada uno de ellos había apoyado a Jake cuando el más lo necesitó. A
decir verdad no tenía ninguna palabra de agradecimiento que pudiera expresar lo
que realmente sentía, así que me esforzaría en hacer un buen desayuno para
todos, para agradecerles su amabilidad y por apoyar a Jake en todas sus
decisiones. Después de terminar descomunal desayuno, preparé emparedados y nos
fuimos todos a la playa a pasar el día.
—Vamos, Nessie… no tengas miedo.
Quil estaba atrás de mí sonriendo y burlándose de mí. No había practicado el
salto de acantilado y nunca lo había visto como algo que temer, pero ya a esa
altura me daba un poco de miedo.
—Si te da miedo no lo hagas— musitó un muy serio Jacob.
—¡Oh! ¡Por favor! ¡Deja de cuidarla como si fueras su papá!— gritó Embry
mientras le daba un codazo a Jake.
—Cierto, Jake. Además, Nessie es mitad y mitad, seguro que para ella es pan
comido. No te preocupes— alegó Quil.
—¿Y si fuera Claire la que estuviera queriendo saltar del acantilado no te
asustaría?— contratacó Jacob gruñendo entredientes.
—Eso es totalmente distinto. Claire todavía es una niña y es completamente
humana. No es lo mismo.
—¡Ya dejen de pelearse! Es mi decisión si me tiro o no, ¿no? —grité cuando vi
que Jacob iba a contestarle a Quil. Rodé los ojos. Todos se quedaron viendo
entre si y asintieron con la cabeza—. ¿Pues saben que? Ahí se ven…
Me armé de valor y así sin más me aventé del acantilado. Mi corazón dejó de
latir un momento por la emoción, el aire golpeaba fuertemente contra mi cara. Me
sentía en profunda libertad, como si estuviera volando, hasta que sentí que
golpeé contra el agua y de un momento a otro me sentí invadida de esta. Profunda
paz llenó hasta cada una de mis células y moví mis brazos y piernas para salir a
la luz. Cuando asomé mi rostro por fuera del agua, sentí como alguien caía a
unos cuantos metros de distancia de donde yo estaba, me acerqué para ver quien
era el que había saltado, pero… no salía. Seguí esperando para ver quien era,
pero seguía sin salir. Empecé a preocuparme. De repente sentí que alguien me
jalaba por debajo del agua y me hundía. Abrí mis ojos para tratar de distinguir
quien me estaba jalando. No fue hasta que me jaló y me pegó hasta su cuerpo que
lo sentí e inmediatamente supe quién era el que estaba a mi lado. Era mi
Jake. Ahí, debajo del agua… alcancé a distinguir una sonrisa en su rostro,
yo le respondí con otra. Me acerqué a sus labios y nos entregamos en un profundo
beso. No me importaba respirar ya que de todas maneras sus besos me robaban el
aire. Era inmensamente feliz, en serio que jamás sería más feliz con nadie que
no fuera este hombre. Me di cuenta de que no podía vivir sin él. Así que lo besé
más fuerte y hundí más mis dedos en su enredado cabello. Ya cuando me estaba
quedando sin aire, Jake me soltó y salimos a la superficie.
—¿Te asusté?— preguntó con una sonrisa en el rostro.
—Solo un poco. Me preocupaba que a lo mejor tuviera que darte respiración de
boca a boca.
—Mmmmm —me miró pensativo. Tenía una cara picara—. ¡Auxilio me ahogo!— empezó
a simular que se ahogaba.
—Ya. Jake, no seas tonto.
—¡Nessie ayúdame!
Se sumergió completamente.
—Ya Jake esto no es gracioso… ¿Jake? ¿Jake? —pregunté con angustia pero Jake
no salía, no se veía ningún movimiento en el agua… nada. Me quedé flotando,
esperando a que este se dignara en salir. Pero no salía.
—¡Jacob! ¡Esto no es gracioso ya sal! ¡Por favor!
Jake seguía sin salir. Así que me sumergí y lo busqué pero no estaba. Me
asusté mucho, así que decidí nadar más al fondo y alcancé a distinguir una
mancha negra. Era su cabello. Era Jake. Nadé a toda prisa, lo tomé por los
brazos y salí a la superficie.
—¡Jake, Jake háblame! ¡Por favor Jake!
—¡Nessie! ¿Qué pasa?—gritó desde arriba Seth, tenía un muy buen oído para
haberlo podido escuchar desde tan lejos.
—¡Es Jake! ¡No responde!
Volví a enfocarme en él y me percaté de que no estaba respirando.
—¡Jake no me hagas esto! ¡Jake!
Nade con Jake en mis brazos a velocidad vampiro hasta la orilla. Toda la
manada ya estaba ahí.
—¿Qué le pasó?— preguntó Embry
—No lo se, de repente dijo que se ahogaba… yo pensé que estaba jugando. Es mi
culpa.
—Tranquila no es culpa de nadie— dijo Quil
—Jake, mi amor, no me dejes. Yo estoy aquí por ti. Quédate conmigo… para
siempre.
Puse mis manos en su pecho y empecé a presionarlo, mientras mis labios se
acercaban a los suyos. Comencé a darle respiración de boca a boca. Mis lágrimas
estaban bañando su rostro. Seguía presionando con fuerza hasta que en un momento
sentí como sus brazos se enredaban en mi cintura y su boca se empezaba a mover
junto con la mía. Mi corazón se abatió por el alivio y mi boca no hizo más que
seguirlo besando. Hasta que volvió la tranquilidad en mi corazón, fue que
reaccioné.
—¡Eres un imbécil!— grité alejándome de él. —Eres el idiota más
grande del mundo. ¿Cómo pudiste asustarme así? ¡Ni te imaginas la angustia que
sentí al pensar que te perdía!
—En serio que esta vez te pasaste— musitó Quil.
—En serio que eres un verdadero Imbécil— dijo Embry.
—Si Jake, te mereces que Nessie se enoje contigo— concedió Seth cruzando los
brazos.
—Y lo estoy —afirmé lo dicho cruzando también los brazos y mirándolo de una
manera desaprobatoria.
—¡Oh lo siento! Nessie, chicos. Pero solo fue una pequeña broma. Solo quería
volver a probar tus labios— se defendió mirando mi enardecida mirada.
—¡Solo necesitabas pedírmelo idiota!
Jake se quedó muy serio, meditando lo que había hecho. Noté el
arrepentimiento en su rostro.
—Ya Nessie, perdónalo, lo importante es que esta bien— musitó Seth.
—No, está no se la voy a perdonar tan fácil— argumente muy segura de mí
misma.
—Perdóname. Sé que fue muy estúpido de mi parte. ¿Qué puedo hacer para que me
perdones?
—No lo se, pero tendrás que esforzarte demasiado para que te perdone esta— le
guiñé un ojo. A decir verdad no quería estar enojada con él. Teníamos ya solo 3
días para poder seguir juntos y no pensaba arruinarlos por la mala broma de
Jake. Él relajó su rostro cuando vio mi guiño, se acercó a mí y pasó un brazo
por enzima de mis hombros, se acercó a mi oído y su respiración me dio de
golpe.
—Te invito a cenar esta noche— musitó casi en un susurro.
Mi corazón se contrajo y mis mejillas se pusieron rojas. Él y yo realmente
nunca habíamos tenidos una cita y eso definitivamente era una cita. ¡Una cita!
Me fascinaba la idea.
—Ammm pues… no lo se, déjame consultar mi agenda a ver si tengo tiempo de
salir contigo— musité con tono pensativo, haciéndome la interesante.
—Pues tendremos que destruir su agenda señorita, para que encontremos un
espacio para mí, porque una mujer tan hermosa como usted debe de tener repleto
de citas en su agenda. ¿Qué le parece si paso por su recamara a las 8?
—¡Hay que cursis!— gritó Seth y todos reímos al unísono.
—Hola Jacob, Renesmee.
Se escuchó una voz a nuestra espalda, y volteamos a ver de quien era. Era Sam
y venia junto con Paúl. Jacob los saludó con una de sus manos.
—Hola Sam, Hola Paúl— les saludé cortésmente.
—Veo que estás de vuelta— dijo Sam. Paúl se limitó a observar.
—Sí, algo así…— respondí tímidamente pasándome un mechón de cabello detrás de
una de mis orejas.
—¿Y piensas quedarte? ¿O te iras? —A decir verdad la voz de Sam se oía muy
seria y hasta me atreviera a decir que mal humorada.
—Ella no tiene por qué contestarte eso— contestó Jacob poniéndose enfrente de
mi. Aquí pasaba algo. Se notaba en el ambiente tenso y pesado.
—Vámonos Sam— le dijo Paúl tomándolo del hombro.
—Sí, vámonos— se volteó y empezó a caminar junto con Paul —Jake...— se volvió
a verlo —ten en cuenta a nuestra tribu— musitó y se fue.
¿Qué rayos había sido eso? Volteé a ver a Jacob con mi cara angustiada, no
sabía que estaba pasando, pero de que pasaba algo, pasaba algo. Las caras de
todos los Quileutes había cambiado, nadie me miraba al rostro. ¿Qué había pasado
con el ambiente familiar de hace unas horas?
—¿Jake? Este… a que se refería…
—¡A nada! No es nada…— me interrumpió sin siquiera dejar de terminar la
pregunta.
—Creo que ya nos vamos— dijo Quil.
—Sí— dijo Embry.
—Nos vemos luego Jake, Nessie— musitó Seth con la cabeza baja.
¿Qué era lo que sucedía para que Seth no se atreviera a verme a la cara? Yo
solo asentí con el rostro y estos se fueron en silencio, como si fueran a un
funeral. Mientras miraba como se alejaban, Jake me acercó a su rostro y besó mi
frente, tranquilizando mi corazón.
—Vamos preciosa, tienes que alistarte para una cita con un galanazo.
Me ocasionó mucha gracia el comentario de Jake, así que decidí olvidarme de
lo que acaba de ocurrir. Me había prometido ser feliz esta semana y no dejaría
que nada me arrebatara esa felicidad. Aunque la duda se quedaría incrustada en
mí ser, ya habría tiempo para averiguar a qué se refería Sam. Jake me juntó a su
cuerpo con uno de sus brazos y nos fuimos caminando a su casa. Yo fui la primera
en meterse a bañar.
Jacob POV
Estúpido Sam, tenía que interrumpir el momento. Ni siquiera sabe si su teoría
es cierta. Nessie no es una vampira completamente y aunque sí sucediera lo que
dijo no tiene por qué meter su cuchara, es mi decisión que haría con ese
problema, yo sabría que hacer. Lo único que no quería es que Nessie se diera
cuenta. ¡Mil veces maldito Sam! Por el momento sabía que Nessie no me
preguntaría nada, pero lo haría, y yo prometí no mentirle más y ser sincero con
ella. ¿Cómo reaccionaría? ¿Qué pensaría ella de todo este embrollo?
Me tumbé en la cama, mientras escuchaba el agua de la regadera caer. Nessie
estaba en el baño, desnuda con su cuerpo mojado y su cabello cayendo sobre su
blanca y perfecta espalda. Dejé que esa imagen me invadiera, para tratar de
bajar mi coraje. En verdad no tuvo el mejor efecto. Sí se me bajó el coraje,
pero ahora tenía otro problema… ¡Estaba deseando tumbar esa puerta y hacerle el
amor a Nessie! ¡Rayos! Yo sabía que ella no estaba lista y la esperaría el
tiempo que fuese necesario, pero es que había tenido su cuerpo tan cerca esos
días, sus besos, sus caricias, que por un momento me habían estado haciendo
olvidar mi autocontrol. Soy un caballero y jamás haría una estupidez que hiciera
que Nessie se alejara de mí, pero no podía negarlo. La deseaba y más de lo que
ella se podía imaginar. ¿Se decepcionaría de mí si supiera lo mucho que deseo
hacerla mía?
La regadera dejó de sonar, Nessie estaba a punto de salir del baño. Me puse
de pie. Tomé mi ropa y toalla y me coloqué a un lado de la puerta del baño
esperando a que saliera para poder bañarme. Un poco de agua fría calmaría mi
calor interno. Cuando Nessie abrió la puerta no esperé verla con solo la toalla
enrollada en su cuerpo. ¡SOLO LA TOALLA ENREDADA EN SU CUERPO! ¿Acaso era una
prueba de Dios? Nessie al verme contemplarla tan abiertamente, se sonrojó,
haciendo que me provocara aun más. Su cabello mojado cayéndole por la espalda,
su piel roja, y el olor de su piel me estaban enloqueciendo. Ni cuando le quité
los pantalones me había sentido así. Me acerqué peligrosamente a ella, estaba a
punto de perder los sentidos cuando alcancé a distinguir el collar del lobo y la
niña en su cuello, empecé a recuperar el control de mis impulsos y di un paso
para atrás. Ella confiaba en mí y no pensaba decepcionarla. A decir verdad me
sentí hasta feliz, no le había mencionado nada del collar desde que noté que se
lo había puesto por miedo a incomodarla, pero me hacía feliz que lo trajera,
para mí simbolizaba que ella ya me había perdonado por lo sucedido aquel día
hace dos años. Recuperé mi control y cerré los ojos.
—Pásele señorita, porque si sigue ahí, no respondo si la ataca un lobo.
Solté una risa nerviosa y Nessie me la correspondió con otra muy similar.
Caminó a prisa y se encerró en mi cuarto. Ya habiéndose ido la tentación en
persona, me dispuse a bañarme y arreglarme. No duré mucho en la regadera, estaba
ansioso por ver a Nessie y salir con ella a una cita. En realidad nunca había
tenido una cita, lo más cercano a eso fue la vez que Bella, Mike Newton y yo
fuimos al cine. Aquel día cuando por primera vez me convertí en lobo. Salí del
baño y noté que Nessie seguía encerrada arreglándose en mi cuarto. Decidí volver
a evaluar mi ropa: pantalón de mezclilla completo —de los pocos que tenia—, una
camisa a botones de manga corta color gris y los únicos zapatos negros que
tenía. En una palabra podría decir que me miraba: decente. Miré el reloj y me di
cuenta de que ya faltaban 10 para las 8. Bajé las escaleras rápidamente, salí de
la casa y corrí al bosque. Sin alejarme mucho encontré unas tigridias de varios
colores. Tomé varias y volví a correr a la casa. Cuando entre a la casa giré a
ver el reloj. Ya eran las 8:07. ¡DEMONIOS! Ya iba 7 minutos tarde. Y en mi
propia casa. Corrí escaleras arriba y toqué la puerta de mi cuarto. Nessie abrió
la puerta.
—Llegas tarde.
No dije nada. Nessie se miraba preciosa. Su cabello perfectamente suelto y
rizado, un sencillo vestido color púrpura, unas zapatillas de tacón muy bajo.
Sin accesorios, mas que mi collar. Preciosa era poco. Se miraba divina. ¿Alguna
vez dejaría de sorprenderme su belleza?
—Lo siento— dije tartamudeando un poco —toma estas son para ti— le tendí las
tigridias
—¡Oh! Gracias, son muy hermosas— noté como sus mejillas volvían a tonarse
rojas.
—¿Nos vamos?— pregunté dándole mi brazo para que lo tomara.
—Sí, vámonos— musitó sonriente, tomando mi mano y dirigiéndonos hacia
abajo.
Nessie decidió poner las tigridias en agua antes de irnos, no sin antes
discutir en qué auto nos iríamos. Nessie quería ir en su mustang y yo acepteé ya
que me daba un poco de pena que fuéramos en mi viejo golf, pero establecí que yo
sería quien manejaría y ella aceptó sin renegar mucho.
—¿Adonde me llevas?— preguntó Nessie mientras yo seguía concentrado manejando
ya por las afueras de Forks.
—A Seattle— le contesté.
—ٳOh! Me parece bien.
Manejé rápido. Se sentía genial manejar un mustang así. Por un momento me
sentí intimidado. Nessie estaba acostumbrada a una muy buena vida. Yo en cambio
vivía sencillamente. Todavía tenía dinero de la pensión de mi padre y trabaja en
el taller —Que por cierto desde que Nessie estaba aquí ni me había aparecido por
el lugar— Sacudí la cabeza. No me importaba. Yo era mi propio dueño. Ya que
estuviera seguro de que Nessie se quedaría conmigo, ya me encargaría de reponer
el trabajo con creces. No me importaba quedarme en la calle, mientras que
tuviera a Nessie a mi lado. Pero… ¿ella querría estar así a mi lado?
De repente sentí que Nessie tomaba mi mano derecha y se la puso en su pecho.
Mi piel volvió a subir más la temperatura y mi corazón dio un brinco. Bajo mis
dedos sentí su corazón palpitar fuertemente. Era armonioso y fuerte. El sonido
más hermoso del mundo.
—Te amo Jake— musitó dulzura en su rostro. Debió notar que algo me
preocupaba. Nessie me estaba tratando de ayudarme a sentir mejor. Y lo había
hecho. Nos teníamos el uno al otro, eso era lo que importaba. Si tuviera que
luchar contra las 2 manadas así serias. Aunque no tuviera dinero, trabajaría y
lo ganaría. Nessie me amaba y eso es lo único que me importaba.
—Yo más Nessie —tomé su mano con una mano y con cuidado le coloqué un tierno
beso, mientras seguía manejando a Seattle hacia nuestra primera cita—. Yo más—
remarqué con mi boca aún entre su mano.
Esta medio sin chiste pero era necesario. ¿Qué le oculta la manada a
Nessie? ¿Por qué está Sam tan preocupado? ¿De donde sacó Nessie el vestido y los
zapatos? ¿Lograra Jake por fin hacerle el amor
a Nessie? Descúbranlo en el próximo Contigo en el Alba XD ¡Ah! Y dejen review
que son mis vitaminas de cada día XDDDD
Kokoro.-
7 comentarios:
Un capítulo genial, me encanta esta historia y esta pareja de tortolitos jeje. Me quedo esperando con ansia el próximo capitulo que sin duda va a ser de los mejores. Un saludo a todas desde España y deseo que pasen felices fiestas. Besos
Me encanto este capitulo es muy bueno leerte de nuevo espero saber pronto que mas va a suceder. Te felicito por tu talento y gracias por compartirlo con nosotras.
Felices fiestas para todas...
Bye isabella black cali colombia
Que bueno estuvo el cap.autocontrol tiene nessie yo lo uviese violado.bsssss
Que bueno estuvo el cap.autocontrol tiene nessie yo lo uviese violado.bsssss
Me parece un capítulo fascinante y ya me dejaste con ganas de masss
Ohhhhh me encanto el capitulo, en verdad que esta parejita me fasina, que gusto que han podido de disfrutar de unos dias llenos de amor y felicidad, espero que esto siga asi por mucho tiempo y que Nessie tome la decision correcta de quedarse junto a el, por otra parte me quede intrigada con la manera de actuar de Sam y por lo que le dijo a Jake que sera eso que ocultan? solo espero que no sea nada grave que ponga en riesgo su relacion mas ahora que parece que todo esta arreglado....
Me encanto la manera en que terminaste el capitulo con esas preguntas jejejeje y por supuesto que estaresmo aqui esperando por el proximo capitulo por este mismo canal........Besos nena y gracias por compartir tu enorme talento
Feliz Navidad para Coka y para ti que Dios llene de bendiciones su vida y que se cumplan todos sus sueños..... Un fuerte abrazo
Me encanta esta historia... Felicidades y muchas gracias por seguir compartiendo con nosotras
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