Hace 10 años fue la última vez que "nos visitaron" los Vulturi…Hace 3 años deje de crecer…
Hace 2 años que no veo a Jacob Black…
Hace un año que soy novia de Nahuel y…
Dentro de 2 semanas me caso con él…y aunque lo amo, hay algo que no me deja estar tranquila… algo que me corta la respiración y no me deja dormir… ¿Me estaré equivocando?
Renesmee
*Todos los personajes y nombres le pertenecen a Stephenie Meyer.
MADRE
MADRE
ORIGINAL DE KOKORO BLACK
Jacob POV
Traté de verme lo más decente que podía. Me corté un poco el
pelo y renté un traje. Sí, algo increíble en mí, renté un jodido traje. Tenía
que verme bien para la boda de Sue y Charlie. Bueno ¿a quién quiero engañar? En
realidad solo lo había hecho porque quería que Nessie me viera bien. ¿Tenía
algo de malo eso? Yo iba por todas. Y si tenía que vestirme decentemente por un
día… pues desde luego que lo haría.
Me sentía sumamente nervioso, Lo más probable es que los
Cullen ya estuvieran en su antiguo hogar, ya que debían decorarlo por que la
recepción se llevaría cabo ahí… en esa magnifica casa escondida en el bosque.
Aquel lugar lleno de recuerdos para ella y para mí… donde vivimos toda su
niñez.
Las manadas no estaban muy contentas de ir a una fiesta
llena de vampiros, pero todos asistirían porque se sentían comprometidos con
los Clearwater y más que nada irían para cerciorarse que todo está bien y que
no haya problemas con los chupasangres.
Faltaban solo unas cuantas horas para la tan esperada
ceremonia que se llevaría a cabo por la tarde.
Me sudan las manos y me siento ansioso.
¿Acaso me veré como un idiota enamorado? Pues eso es
precisamente lo que soy, soy un idiota enamorado.
—Te ves bien— dijo Seth sonriente entrando en mi cuarto.
—¿Qué haces aquí? ¿Qué nadie conoce el timbre o qué?— me
carcajeé fuertemente —¿No deberías estar con tu madre o algo así?— pregunté
sonriendo.
—¡Vaya! Te ves contento, eso es bueno… ¿estás listo para tu
rencuentro con Nessie? Supongo que tienes un plan o algo así…
¿Un plan? Pues… realmente no tenía nada, solo pensaba llegar
a lo bruto como siempre.
—Definamos plan— dije apenado.
Seth soltó una sonora carcajada, haciendo que mi sonrisa se
ensanchara aun más.
—Es bueno ver que eres más parecido al Jake que todos
queremos— dijo dándome unas palmadas en la espalda.
Asentí apenado. Ellos solo me habían estado protegiendo de
mi mismo. Si hubiera acabado con mi vida… en este momento no estaría tan cercas
de volver a verla.
—Gracias por todo Seth… a todos…— terminé con una sonrisa
palmeando su espalda al mismo tiempo que él palmeaba la mía.
—Ahora amigo, ve por ella y no dejes que se te vuelva a
escapar, y ya sabes, si necesitas robarte a la mujer casada… nosotros siempre
podremos detener al histérico esposo— soltó con una enorme carcajada que
retumbaba por toda la casa.
—Ten cuidado que puedo tomar tu proposición en serio— dije
con una simple sonrisa.
—Hablo en serio— dijo.
—Lo se Seth… lo se.
Me sentía feliz de contar con los mejores amigos del mundo y
sobre todo… me sentía feliz de contar con Seth Clearwater en mi vida. El mejor
amigo de todos. Volteé para verme en el espejo y terminé de acomodarme la
corbata que había batallado tanto en ponerme.
—Estoy listo, ahora solo me queda esperar a que sea la hora—
susurré más para mi mismo que para Seth.
Unas cuantas horas más y la vería.
Vería a Nessie Cullen… otra vez.
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Renesmee POV
—¡Te ves Hermosa mami!— gritó Taylor desde la puerta
mientras tía Alice terminaba de maquillarme.
—Así es Taylor, tu mami es preciosa— respondió con voz
alegre mi tía.
Se lanzó a mí y lo abracé.
—Tú también te ves muy guapo— contesté sonriéndole, me dio
un beso en la mejilla y salió corriendo de la recamara a seguir jugando.
Ya todo estaba listo. La sala se había convertido en todo un
hermoso salón. Tía Alice y mi madre se habían esforzado mucho para arreglarlo
todo y que todo saliera perfectamente bien. La tía Rosalie se encontraba
arreglando a mi madre, mientras que la tía Alice se encontraba arreglándome a
mí. Estaba sumamente nerviosa, como si la novia fuera yo.
Quería verme bonita,
así que esta vez me había salido de todos mis estándares y me había puesto el
vestido más sexy que me había encontrado en el centro comercial. No estaba muy
convencida de usarlo pero tía Alice me convenció que era el mejor vestido para
tratar de conquistar a alguien. Era de tirantes gruesos, con un escote discreto
para el busto, pero de la espalda estaba completamente abierto hasta la
cintura. Era largo y completamente pegado al cuerpo, abierto de un lado
mostrando por completo una de mis piernas. De color rojo sangre que complementé
con accesorios y zapatos negros. Eso sí, mi accesorio principal era el collar
del lobo y la niña que Jake me había dado ya hacía tanto tiempo y mi cabello
iba suelto y ondulado cayendo en cascadas sobre mis hombros y espalda. Como yo
sabía que a Jake le gustaba.
—¿Crees que querrá escucharme?— susurré.
—¡Claro que sí! Estaría loco si te rechazara— contestó
animada.
—¿Y… puedo preguntarte por fragmentos de mi futuro?— esa
pregunta sonó casi en modo de suplica.
—No señorita, sabes que mientras estés mezclada con lobos no
puedo ver ningún fragmento de tu futuro. Además no te preocupes, tengo fe en
que todo saldrá bien al final para todos— terminó con una pequeña sonrisa.
Me puse de pie y me contemplé en el espejo. El pelo estaba
perfecto y el maquillaje ni se diga. Me sentía como si fuera otra. Lista para
conquistar o lista para rogar si fuera necesario.
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Pasaron rápido las horas y ya todos estábamos en nuestra
posición para la ceremonia, pero…
¿Dónde estaba Jacob Black?
Volteaba desesperada para buscarlo y por más que me esforzaba
por tratar de hallarlo, más me desesperaba al darme cuenta de que no llegaba.
Me sentía un poco incomoda por la profunda mirada de desprecio que Leah me
había otorgado cuando nos topamos en la entrada, pero yo trataba de no tomarle
importancia. A fin de cuentas no estaba aquí para darle explicaciones a nadie
que no fuera Jake.
Cerré los ojos y no podía hacer más que recordar su perfecto
cuerpo moreno, sus grandes y cálidas manos, su hermosa y amplia sonrisa blanca,
y sus oscuros y apasionantes ojos. Necesitaba a Jacob Black y lo necesitaba
urgentemente en mi vida junto a nuestro hijo... el fruto de nuestro amor y
nuestra pasión, Taylor Black, el pequeño de ojos oscuros, pelo negro y piel
blanca, que se había convertido en la luz de mi vida.
La ceremonia dio comienzo y Jacob Black no estaba por ningún
lado. Me sentí desanimada. Tal vez él no vendría. Tal vez me estaba sacando la
vuelta. ¡Claro! ¡Cómo era tonta! ¿Qué me hacía pensar que él asistiría si él
cree que estoy casada? Cree que no lo quiero. Cree que andaba de luna de miel
por el mundo. Me sentí flaquear y hasta creí que me iba a caer, pero en eso
sentí una gran mano sostenerme del brazo.
—¿Estás bien?— preguntó Nahuel colocándose aun lado de mi,
abrazando a Taylor.
—Sí, gracias— respondí apenada de ser siempre rescatada por
él.
—Te ves hermosa— susurró cerca de mi oído. A lo cual
correspondí poniéndome del color del vestido.
Nahuel sonrío ampliamente y guardamos silencio para
proseguir a escuchar la ceremonia.
Mientras la escuchábamos, me recordé de la que Nahuel y yo
habíamos sido participes, y me sentí terriblemente culpable.
—No necesitas estar aquí— dije cerca de su oído.
—Lo se, pero quiero estar cerca de ti, por si las cosas no
salen como tu deseas— susurró solo para mi.
Mi corazón dio otro brinco. ¿Es que acaso Nahuel no se
merecía ser feliz? Me maldije a mi misma por estar tan cerca de él y lastimarlo
como nadie lo había hecho. Y que aun así, él siguiera ahí… por mí, para mi o
para Taylor. Siempre ahí.
—Mira se quedó dormido.
Volteé y vi a Taylor dormido sobre los brazos de Nahuel. Se
miraba tan hermoso, acaricié su negro cabello y traté de tranquilizar mis
nervios sin éxito.
—Dámelo, quiero cargarlo yo— Nahuel me lo pasó suavemente y
le colocó un beso en la frente.
Escuché un pequeño gruñido que reconocería en cualquier
parte, mi corazón se contrajo al voltear y verlo en la entrada. Su mirada
estaba perdida. Se miraba exquisito en traje, como si este resaltara aun más su
cuerpo. Pero, había algo distinto en él… su olor… no era el mismo de siempre.
Traté de identificar su aroma sin mezclarlo con el de los demás en la
habitación, pero me era casi imposible. Podía jurar que olía a…
—¿Humano?— preguntó Nahuel.
Volteé a verlo al rostro y me di cuenta de que no era la
única que lo había notado. Jake olía a humano.
—Lo hizo…— respondí en voz baja —a fin de cuentas si
renuncio a su espíritu lobo— susurré con temor en mi voz
—No te preocupes, tú sabías que sucedería. Además tú también
serás mortal y tendrás tu vida con él— respondió con la mirada hacia enfrente y
sin expresión alguna en su rostro.
Jake lo había hecho. Por un momento agradecí la locura de
desaparecer un año, porque por lo menos eso significaba que Jake y yo podríamos
tener nuestra vida mortal juntos. No sabía si era el traje, o el corte, o su
nuevo olor, pero me sentía sumamente atraída hacia él, como nunca en la vida.
—Tranquila— dijo Nahuel —Hazlo por Taylor, no vayas a perder
la calma— dijo acariciando el cabello de mi pequeño.
Y volví a escucharlo gruñir, volteé a mirarlo de nuevo, pero
ahora estaba acompañado de Leah.
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Jacob POV
Ella estaba parada ahí, como una diosa, su escote dejaba al
descubierto su espalda de una manera perturbadora y su cabello cayendo como
cascada me hacia desearla intensamente. Pero Nahuel estaba junto a ella, a su
lado… y… ¿cargaba a un niño?
Nahuel le pasó el niño a Nessie que al parecer estaba
dormido y éste le dio un beso. El niño era idéntico a Nessie. Un gruñido salió
de mi pecho, sin poderlo evitar.
Era su hijo.
Nessie ahora era madre.
Habían tenido un hijo. Sentí que perdía la vista por un
segundo y que dejaba de escuchar todo a mí alrededor. Quería darme la vuelta y
correr, perderme en el bosque y ahora si darme un tiro, tirarme de un
acantilado, o lo que fuera que acabara con mi vida lo más pronto posible.
—Tranquilo— dijo Leah tomándome del brazo.
—Tienen un…— ni siquiera podía terminar las palabras.
—Yo también me sorprendí, no lo sabía, acabo de verla
cargando al niño— susurró Leah
—Pero… ¿no crees que también se parece a ti?—
preguntó en voz baja.
—No digas tonterías, es más que obvio quien es el padre de
su hijo— respondí con todo el dolor del mundo. Vi como Nahuel acariciaba el
cabello de su hijo, para darme cuenta de lo que era más que obvio. Ya no tenía
ninguna posibilidad con Nessie, ahora era madre y era más que nunca un amor
prohibido. Y otro gruñido salió de mi pecho.
Nessie volteó a verme de nuevo y me pareció verla pálida al
notar a Leah aun lado de mi.
—Así que querías que hiciera mi vida Nessie… de acuerdo,
vamos a pretender que ya hice mi vida— susurré para mi mismo.
Tomé fuertemente a Leah del brazo y pasamos a tomar lugar en
la ceremonia.
—Leah por favor sígueme el juego— susurré con una voz
desgarrada.
—¡Oye! no soy un juguete que puedas usar y desechar cuando
se te plazca— me soltó el brazo —sí, te amo, pero no por eso voy a dejar que me
utilices de nuevo— terminó ella.
Leah tenía razón, yo no era nadie para pedirle nada a ella,
suficiente daño le había hecho la semana pasada como para ahora continuar con
su sufrimiento.
—Pero aun así… te ayudare por el día de hoy. Pero solo por
el día de hoy. No soy tan mala. no dejare que te hundas solo. Aun así creo que
necesitas hablar con ella— musitó seria, contemplando a su madre junto a
Charlie.
Yo ya no tenía el valor de enfrentarme a Nessie. Ya ni
siquiera podía voltear a verla. Como si fuera un robot ¡sin expresión, sin
respirar, sin alma, sin nada— me dispuse a terminar de escuchar la ceremonia
que ya le faltaba poco para terminar, para después inmediatamente irme a mi
casa. Solo quería que Charlie y Sue me vieran aquí, después de todo ellos no
tenían la culpa.
Todos aplaudían. Volteé hacia enfrente y vi como Charlie y
Sue se daban un tierno beso, la ceremonia había terminado. Todos empezaban a
incorporarse por la habitación a tomar asiento en las mesas. Yo no estaba de
humor para eso, así que me dirigí directamente hacia Charlie y Sue a
felicitarlos.
—¡Charlie por fin te ataron la soga! Bien hecho Sue— le di
un abrazo a Charlie mientras Sue nos sonreía fuertemente, inmediatamente
después del abrazo a Charlie abracé a Sue.
Ya había cumplido, ahora podía
marcharme. Volteé porque había más gente esperando saludarlos. Pero su olor de
dio de lleno en la cara.
Dios ¿por qué me haces esto?
Volteé hacia atrás y ahí estaba ella. Hermosa, incomparable,
única, prohibida… madre.
—Hola Jake— susurró con la mirada baja.
—¿Qué tal Ness?— pregunté sin animarme a respirar su aroma,
porque sabía que me enloquecería. Sentí mi corazón contraerse al notar que
traía el collar que yo le había dado.
—Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que nos vimos—
susurró tratando de subir su mirada.
Yo rogaba porque la subiera, necesitaba verla a los ojos. La
subió y como siempre… me perdí en ella. Inconscientemente mi mano tomó su
cabello y se lo acomodé por detrás del oído.
—Sí, Ness, mucho tiempo— contesté con una sonrisa
melancólica. —Nos vemos…— alejé mis manos de su cabello muy a mi pesar y me di
la vuelta para toparme con Leah, que me tomó de la mano y seguimos caminando.
—Ya tengo que irme— le murmuré a Leah.
—No seas cobarde y llorón. ¡Afróntala!
—¿Qué crees que me diga? ¡Ah! Hola Jake, ¿qué crees? soy
madre y estoy muy feliz con mi esposo el chupasangres. No gracias.
Rodó los ojos
—Quédate aquí, voy por algo de beber. No te vayas. Pobre de
ti que te vayas.
—Ya pues… me da igual— contesté tirándome en una silla. A
fin de cuentas era masoquista, así que me dedicaría a observarla a lo lejos.
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Renesmee POV
Sentí mi corazón salírseme por la boca cuando Jake colocó mi
cabello por detrás de la oreja. Su temperatura aún era cálida y su piel suave.
Él se volteó y se fue de la mano con Leah. Habían estado juntos toda la
ceremonia. Lo más probable es que Jake hubiera rehecho su vida y yo no podía
llegar y lastimar a Leah de nuevo así. Suspiré audiblemente mientras miraba
como platicaban.
—Estás celosa— susurró Nahuel acercándoseme por la espalda.
—¡No! ¡Cómo crees!— escupí con todo el sarcasmo del mundo.
—Lo siento— respondí al sentirme avergonzada por mi comportamiento.
—Como me hubiera gustado escucharte alguna vez celosa por
mi— dijo más para si mismo que para mi.
—Nahuel… yo…
—No digas nada. Por cierto subí a Taylor a tu antigua
recamara para que durmiera.
—Gracias— asentí aun apenada.
—Ve a hablar con él— musitó suavemente mientras la luz de la
luna se filtraba por la ventana.
—Esta con Leah— respondí.
—Ya no, mira.
Volteé y vi que Leah se dirigía hacia las bebidas.
—Pues sí, pero regresara— contesté no muy contenta.
—Pues para eso necesitas darte prisa y llevártelo.
—¿Eh?
—Anda Nessie ve!.
No entendí a lo que se refería Nahuel, pero tomó mi mano, la
beso, me puso de pie y me empujó en dirección a Jake.
Yo debía aprovechar esta oportunidad, quizás la ultima que
tendría. Puse en movimiento mis pies y me dirigí al ahora frágil humano Jacob
Black que me miraba con ojos como platos al ver que me dirigía a su mesa.
—¿Jake?
—¿S-si?— respondió nervioso y hasta casi tartamudeando.
—¿Podríamos ir para afuera?— pregunté con temor a una
negativa.
—Seguro— respondió y se puso de pie para seguirme. Bien, eso
había sido sencillo.
Salimos al bosque y seguí avanzando hasta adéntrame más y
que nadie nos interrumpiera.
Me era complicado caminar con mis zapatillas, pero
trataba de moverme sensualmente y provocarlo un poco. Tropecé con una piedra y
estuve a punto de caer al suelo hasta que las cálidas y grandes manos de Jake
me sujetaron con fuerza y me pegó a su cuerpo.
—Lo siento— murmuré entrecortadamente al sentir su cuerpo
tan cerca del mío.
—No hay cuidado— susurró dejándome anonadada con su aliento
tan cerca de mi cara.
Nuestra mirada se hizo una sola y mis labios
inconscientemente se acercaban a los suyos.
¿Cómo se sentiría probarlos de
nuevo? Más de un rápido movimiento él se alejó de mi… demasiado pronto para mi
gusto.
—Mira Nessie, ya se de lo que quieres hablar conmigo— dijo
dándome la espalda
—¿Ah si?
¿Sabía que había ido a buscar mi mortalidad y que teníamos
un hijo? ¿Quién se lo había dicho? ¿La tía Alice?
—Solo quería que supieras que seguí con mi vida, ahora estoy
con Leah, espero que lo comprendas.
Sentí mis piernas tambalearse. Él lo sabía todo y no le
importaba nuestro hijo. No le importaba que yo tuviera las intenciones de ser
mortal para pasar mi vida a su lado. No podía ser cierto que a él no le
importara.
—Pero… ¿y Taylor?— pregunté angustiada.
—¿Taylor? ¡Ah! Así que así se llama…
—Sí— respondí con todo el dolor de mi corazón.
—Pues para eso tienes a Nahuel. Además…
—No…— lo interrumpí —ya no necesitas decirme nada más. Toda
esta perfectamente claro.
Sí, muy claro. Él había decidido hacer su vida con Leah y
para eso tenía que deslindarse de mí y de nuestro hijo. Me di la vuelta y traté
de correr, pero los malditos zapatos no me dejaban correr con tranquilidad y
esta vez si me estampé con el suelo.
Lloré con impotencia.
—¿Estás bien?— preguntó Jake en mi espalda apresurándose por
levantarme.
—¡No me toques!— le grité tratando de incorporarme.
—Pero Nessie yo…
—¡Ya no quiero escucharte!— grité con cólera en mi voz.
Vi como la frente de Jake se arrugó y apretó los puños.
—Bien niña mimada, tú eras la que querías que habláramos y
ahora lo haremos— dijo tomándome los brazos con fuerza.
—NOOOO— grité fuerte.
—¡Cállate y déjame hablar!— gritó más fuerte.
—¡Auxilio! ¡Auxilio!— Empecé a gritar como loca.
—Si no te callas por las buenas y me escuchas, te callare
por la malas— musitó con rabia.
—Auxilio— volví a gritar ignorando sus advertencias.
—Tú lo pediste.
Y el mundo se detuvo cuando aplastó sus labios con fuerza
sobre los míos. Sus movimientos eran fieros pero eso no impidió que mi boca
inmediatamente correspondiera a la suya. Sus cálidas manos pasaban acariciando
mi espalda desnuda dándome choques eléctricos… como la primera vez que habíamos
estado juntos. Mis manos se fueron a su cabello y lo acerqué más a mí. Sus
manos jugaban con mi piel para después tomar fuertemente mi cintura y pegarme
todo lo posible a su cuerpo.
—Nessie— susurró contra mis labios mientras una de sus manos
recorría mi pierna expuesta.
¡Dios Mío! Lo quería tanto. Lo amaba tanto. Lo había
necesitado tanto. Solo nos separábamos cuando nos hacia falta el aire, pero
volvíamos a juntarlos inmediatamente. Ese hombre era necesario en mi vida,
inclusive más que el aire o el alimento. Jacob Black lo era todo para mi, él y
mi hijo…
¡Mi hijo!
Me separé de él empujándolo. Yo no podía estar con él si
había rechazado a mi hijo. Por más que lo amara, por más que lo necesitara, él
no podía ser parte de mi vida así.
—No te me vuelvas a acercar— musité sin aliento.
—Pero… Nessie…
—¡Que no!— grité otra vez.
Él se volvió a acercar a mí y me tomó del brazo.
—¡Que me sueltes!— grité forcejeando contra su brazo, no
quería moverme bruscamente por temor a dañarlo ahora que era humano.
—¿Qué no oíste? ¡Que la sueltes!— gritó Nahuel acercándose y
propinándole un puñetazo a Jake en la cara.
—No, Nahuel… ¡NO! Recuerda que es humano, podrías hacerle
mucho daño— grité llorando.
Jacob se acercó corriendo y le propinó una patada al
estomago a Nahuel. A pesar de ser humano, Jake lo había golpeado fuertemente,
tanto que lo hizo tambalearse y dar tres pasos atrás.
—Imbécil— musito Nahuel y se le dejo ir encima.
—¡NO!— grité con toda mi alma al notar que Nahuel iba a
golpearlo con todas sus fuerzas y corrí aprisa colocándome enfrente de Jake
para recibir un fuerte puñetazo en el estomago y quedar inconsciente bajo los
pies de Jacob y la mirada atónita de Nahuel.
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Jacob POV
—¡No!— grité horrorizado de ver a Nessie inconsciente a mis
pies.
¿Qué estupidez estábamos haciendo? Ella me estaba
protegiendo.
—¡Estúpido! ¡Mira lo que le has hecho!— le grité a su
supuesto esposo.
—Maldita sea— gritó él agachándose y tomándola del suelo.
—¡Déjala!— grité. Muy en ello después de golpearla todavía
tenía el descaro de cargarla.
—¡No! Esto no es mi culpa si no la tuya. Me la llevo lejos
de ti. Yo le prometí que la cuidaría a ella y a su hijo, ya que al parecer tú
no lo puedes hacer— musitó con desprecio.
—¿De qué hablas?
—¡No te hagas! Escuché su conversación. Y déjame decirte lo
poco hombre que eres.
—¿Yo? ¡Tú, Que estabas escuchando conversaciones ajenas!
—No era mi intención, solo quería asegurarme que todo estaba
bien, mantuve la distancia, pero recuerda que puedo escuchar lo que sea desde
kilómetros de distancia… Además no te confundas, aquí el que la regó fuiste tú.
¡Bastardo! ¡Cobarde!
—¿Cobarde? ¿Pues qué querías que hiciera?— pregunté
angustiado con lágrimas en los ojos.
—Pues que correspondieras a sus sentimientos, ella te ama,
hizo todo por ti, tienen un hijo, y aun así la mandas a volar. Te quedaras solo
como el perro que eres.
¿Acaba de escuchar bien? ¿Nessie me amaba? ¿Había hecho todo
por mí? ¿Que teníamos un hijo? Sentí mi alma partirse en mil pedazos. No
entendía nada de lo que estaba diciéndome.
—Me estas diciendo que Taylor… es hijo mío— musité con
angustia y esperanza en mi corazón.
—¿Qué no dijiste que ya sabías que era lo que quería decirte
Nessie?— preguntó sorprendido.
—Sí, pero yo pensé que solo quería ser compasiva conmigo,
que quería decirme que ustedes eran felices en su matrimonio y que tenían un
hijo— respondí con un nudo en la garganta.
Nahuel empezó a carcajearse.
—Como eres estúpido, ni siquiera nos casamos…— respondió él.
—¿Qué? ¿No? Entonces el año y cuatro meses que estuvieron
fuera y eso…
—Eso no te lo responderé yo. Solo te diré que no nos
casamos, ella te ama y Taylor es hijo tuyo— dijo Nahuel con un semblante más
tranquilo.
Me dejé caer de rodillas incrédulo.
Genial había metido la pata hasta el fondo. Nessie y yo
habíamos tenido un hijo, ella no se había casado y me amaba. Pero ahora yo la
había lastimado, por mi culpa fue golpeada y probablemente cuando se entere
papito Cullen me querrá matar.
—Nahuel, no tenía idea. Te ruego que me des a Nessie, déjame
la llevo al hospital.
—No la dejare contigo, no me voy a arriesgar a que la
lastimes más.
—¿Todavía la amas?— pregunté con seriedad.
—Más que a nada ni a nadie. Pero ella te ama a ti, así que
puedes quedarte tranquilo. Yo no soy una amenaza.
—Entonces te lo ruego… por favor déjame enmendar mis
errores. Déjame llevarla…
Vi como Nahuel lo dudó, pero asintió. Me puse de pie y puse
mis brazos para poder recibir a la mujer de mi vida.
Hermosa, divina, incomparable, única… madre… de mi hijo.
Mi pecho se llenó de esperanza, pero verla inconsciente me
hacia sentirme terriblemente culpable.
—Toma— me puso las llaves del mustang de Nessie en mi bolsa
del pantalón.
—Gracias— asentí y corrí hacia el mustang de Nessie con ella
en mis brazos, seguido de cercas por Nahuel. Cuando llegué a la cochera, Edward
me miraba con sumo desprecio y Bella estaba colgada de su brazo con otro rostro
colérico.
¡Genial! Ahora no tenía tiempo para eso.
Lo siento Edward, pero ella es más importante que cualquier
otra cosa. Ya me mataras después.
Pensé sabiendo que lo escucharía. Lo oí suspirar y asentir.
También volteé y miré a Leah que corría a hacia mi, pero Nahuel la interceptó.
Me dio la impresión de que se miraban profundamente a los ojos. No les presté
mucha atención, abrí el mustang y coloqué a Nessie en el asiento del copiloto,
mientras corría a introducirme al auto, arrancarlo y manejar a toda prisa hacia
el hospital de Forks.
La cabeza me daba vueltas, no entendía nada. Pero Nessie
solo había sido mía y era madre…
Una hermosa madre. Madre de mi hijo. Mi hijo…
Taylor Black.
Aceleré todo lo que pude, ahora solo importaba que Nessie
estuviera bien, poderme disculpar y que me escuchara. Ahora era padre... necesitaba
luchar por mi familia... La familia que siempre desee... junto a Nessie.
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Hola gente bonita. Mil gracias por todo su amor y apoyo...
Las amo y nos leemos si mi laptop o mi madre me dejan la
próxima semana.
Koko.-
6 comentarios:
Excelente historiaaaa, me encantaaa! Te luciste de nuevo! Gracias por hacerme creer en un amor incondicional y q soporta cualquier.cosa!!!! Esperando con ansias el nuevo capítulo espero que nessie sepa perdonar
me encanto huy que rollo espero que puedan resolver el mal entendido y se que edward ya sabe que jacob no entendia nada pero me encanto maravillosa historia esperare el proximo cap. me quede con ganas de mas
haaaaaayyyyy!!! Kokoro!!!!
No me dejes así!!! jajajajaja
Me encanto que Jacob descubriera su paternidad... Y ese orgullo con el que dice ''Mi hijo Taylor Black''
auuuuu!!!!! literal me hizo aullar jajajaja
Me impacto la noticia de Jacob HUMANO!!! Aunque era de suponerse... Como viviría una eternidad sin Nessi?
Lo único que me entristece es que ya no sean eternos.... Me había acostumbrado al amor por toda la eternidad....
Bueno ahora que Nessi (aunque inconsciente claro) esta en los brazos de Jacob me siento mas feliz y tranquila por ellos!!!!
Espero con ansias el próximo capitulo!!!
Fue un excelente reencuentro!!!!
Un fuerte abrazo Kokoro!!!
Nancy Q.
Hola Kokoro, que super capitulo te luciste me encanto muchisimo..
Jake metiendo la pata hasta el fondo al hacer suposiciones antes de tiempo lo bueno es que llego Nahuel y le aclaro la duda, pero pobre Nessie tuvo que pagarla ella, ahora solo hay que esperar que puedan hablar para aclararlo todo.. me encanto lo orgulloso que se sintio Jake al saber que era el padre de Taylor, y me sorprendio mucho saber que era humano, pero era de suponer que no queria seguir una eternidad sino era al lado de Nessie.
Hermosa historia y que nos hace ver que el amor siempre lo puede todo aun y cuando haya obstaculos y malentendidos que vencer.
Gracias Kokoro por darnos la oportunidad de gozar con esta hermosa historia... Besos
P.D. pero como nos dejas asi con ganas de seguir leyendo mas, rogare para que tu laptop y tu mami te dejen publicar la proxima semana. ;)
Koko,
Me super sorprendiste con esta bella entrega, te felicito nena, me super encanto...
Pobre Jake, tan bobo y descuidado y Nahuel woooooow que amoooor tan bello mmmm espero que Leah y el sean amigos jejejeje se lo merecen jajaj
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