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lunes, 27 de septiembre de 2010

Traicion Imperdonable- Capitulo 2


Capítulo 2

Capitulo original de Cunning Angel


Mi corazón está mutilado hasta las venas
Y yo continúo cerrándolo
Y tú me cortas, lo abres y yo…
Sigo sangrando, sigo sangrando…
Amor.

Observó la habitación con vergüenza, al comprobar que estaba convertida en un caos total…como en tantas otras noches, y mediocremente no pudo dejar de agradecer el hecho de que ya hubiese agotado todas sus lágrimas, ya que no tenía fuerzas para nada, ni siquiera para continuar llorando.
Le odiaba…
Se levantó del piso en el que había permanecido ovillada desde que él partió y salió de su alcoba rumbo al baño; mintiéndose a si misma; afirmando que necesitaba darse una ducha con urgencia.
Finalmente, dejó que su cuerpo se relajara con un baño de agua caliente. La sensación era increíble, pero aún así dejó a la ducha correr, su sonido le gradaba.

—Podría hacerles daño.
—No seas ridículo, ni al bebe ni a mí nos pasará nada.
—Está bien, pero cierra el grifo, no quiero que tu torpeza y mi pasión terminen por dañar nuestro hijo.
—¿Quién te dijo que era niño? ¿Y si es niña?
—Bueno, a la niña o niño, como sea amor. El caso es que-
—Edward cierra tu boca y hazme el amor.
—Tus deseos son órdenes mi vida…

— ¡Maldito! —murmuró, mordiéndose los labios para no romper a llorar nuevamente, pese a que sabía que él no estaba ahí. Ahora no necesitaba reprimirse, no necesitaba disimular.
—Cobarde. ¿Por qué se rindió tan pronto?, ¿Por qué se negó a luchar?

Nuevamente las lágrimas comenzaron a bañar su rostro y dejó que el agua se llevase todo rastro del dolor que su indiferencia le causaba.

¿Cómo era posible que después de tanto llorar aún quedasen infames evidencias del tormento que le producía?
Por mucho que a diario se repitiese a si misma que él no valía su llanto, él no se merecía sus pensamientos, el no era digno de su corazón.

…El tiempo comienza a transcurrir
Y antes de que te des cuenta
Estás congelado…


Edward no la amaba, desde hace mucho tiempo había dejado de hacerlo, ni siquiera la deseaba. Ya no le quedaban fuerzas para mantenerse firme, no podía seguir luchando, no cuando estaba sola en esto.
Salió del baño con el corazón hecho trizas. Le odiaba, sí, le aborrecía, le despreciaba con todo su ser por convertirla en lo que era ahora.
Jamás podría perdonarle haber roto su promesa. Él le había jurado que jamás la dañaría, y aquello era todo lo que se había dedicado a hacer.
La había perdido…
¡Dijo que lucharían juntos! Sin embargo, desde el comienzo de sus diferencias todo lo que había hecho es huir, esquivar los problemas; él prefirió mil veces refugiarse en su trabajo que afrontar el hecho de que existía un problema entre ellos, le dio la espalda cuando ella más le necesitaba.
Intentó creer que no le importaba, ignoró el dolor punzante durante meses, omitió su propio llanto. Hubiera sido capaz de todo por él, sin importar las consecuencias, era una chica ilusa y enamorada.
Él sabía muy bien que ella era tan culpable como él de su estado actual.
Día a día le fue perdiendo, le desgarraba el hecho de que los ojos poco a poco fueran perdiendo ese brillo seductor tan propio de él, le sentía cada vez más lejano. Sus encuentros sexuales se limitaban a una vez cada quince días, hasta que finalmente llegó un punto en el que aquella unión se volvió inexistente. Ella fue testigo de aquel distanciamiento y no hizo nada para detenerlo.
Antes de nacer Nessie eran un par de joven enamorados, la vida giraba en torno a él y podía jurar que yo ella era la niña de sus ojos.
Nunca estuvo tan segura de algo en su vida como lo estaba de aquel amor. Él hizo flaquear sus inseguridades, le hizo ver que lo de ellos era real, que tenía futuro…

Pero nada es más grande
Que la ráfaga que llega con tu abrazo
Y en este mundo de soledad
Veo Tu Rostro


Se casaron jóvenes, y aunque en un principio a ella le aterraba la idea del matrimonio, Edward con el correr de los meses le demostró que no había nada que temer. Dijo que su amor era suficiente para mantenerlos firmes…
Pero se equivocaba, el amor no era suficiente, olvidó mencionar que, al igual que una planta, necesita de constantes cuidados, detalles, gestos, palabras de amor, caricias, y sobre todo no reparó en el hecho de que si no se riega, la planta muere…
Se confiaron, se rindieron.
Se dirigió a la habitación de huéspedes, donde solía dormir Edward desde hace dos semanas…
Hubiera preferido acudir a la comodidad de su cama, pero la habitación se encontraba hecha un desastre. Al menos tendría algo con lo que mantenerse ocupada el día de mañana.
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— Entonces… ¿Qué me dices?
— ¡Tú sabes muy bien que no creo en el matrimonio!
— Lo sé amor, pero debes comprender que no porque tus padres hayan fracasado quiere decir que a nosotros nos pasará lo mismo.
— ¿Me das tu palabra?
— Te lo juro Bella.
— Promételo… prométeme que nunca seremos como ellos, que no cometeremos sus mismos errores. ¡Promételo!
— Te lo prometo cariño. Mi amor por ti es demasiado enorme para ser opacado por pequeñeces.

— No quiero terminar como ellos. No quiero ser testigo de cómo el paso de los años termina por destruir nuestra relación.
— Eso no pasará mi vida, no permitiré que eso suceda. Yo te cuidaré pequeña.
— Te amo Edward.
— ¿Eso es un sí?
— Sí, si quiero ser tu esposa.
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— ¡Me lo prometiste! — gimió mientras caía de rodillas sobre el piso.
— ¡Prometiste que no repetiríamos la historia! ¡Dijiste que no seríamos igual que mis padres!
— ¡Me diste tu palabra maldita sea! — dijo en un hilo de voz. Dejó salir de su pecho las palabras que tanto le dolían, las que Edward jamás oiría salir de sus labios, su pesadilla más grande vuelta realidad.
— Dijiste que no me abandonarías, prometiste que me cuidarías…
— ¡Te amaba! Lo eras todo ¿Cómo se supone que debo continuar cuando el hombre con el que vivo me ignora de una forma admirable? — dio gracias que su pequeña Nessie tuviera el sueño tan pesado... se consideró una pésima madre. Estaba dejándose llevar por el dolor en su pecho sin contar con que su hija podía despertar en algún momento, pero el dolor punzante en su pecho hacía que fuese imposible pensar con claridad.
Respiró hondo y se levantó del frío suelo acercándose con pasos temblorosos a su cama, le aterraba reconocer que aún aquel simple aroma causaba estragos en ella. Una vez recostada entre las sábanas, vestida únicamente en ropa interior hundió su rostro en la almohada, aspiró los restos del intoxicante perfume de su marido como si fuese un drogadicto con los últimos miligramos de su dosis.
De pronto, una fría brisa le erizó la piel, la ventana estaba abierta…
Buscó bajo la almohada y ahí se encontraba la polera y pantalón que Edward solía usar para dormir…
Dejó el pantalón de lado y se abrigó con aquella camiseta. De inmediato, fue embriagada de su esencia. Esa fragancia tan varonil, con una mezcla entre dulce y fresca, la misma en la que se perdía en sus noches de pasión desenfrenada, la misma que inhalaba al perderse en su pecho, la misma que era capaz de hipnotizarla y hacerla perder la razón.
Hoy le recordaba lo mucho que había perdido en estos últimos dos años, le mostraba la falta que le hacía su esposo, lo mucho que extraña aquellos besos, sus caricias, sus ‘te amo’. Ella en verdad le odiaba…

…Pero algo sucedió
Por primera vez estando contigo
Mi corazón se derritió en el suelo
Encontrando algo verdadero…


Se suponía que él sería distinto, que él la amaría…
Se suponía que él sería paciente.

— ¡Demonios! ¡Sabías que esto sería difícil! — Quiere decir más, pero todo se queda ahí; en su mente. Las palabras que pelean por salir mueren en su boca.
Fuiste tú quién lo prometió, no yo ¡FUISTE TÚ! —gritan sus pensamientos, y duele porque la herida aún está abierta.
—Eras tú quien debía ser fuerte, por mí, por nuestra hija… por ambos… —musita en rendida en un hilo de voz.
— ¿Porqué te rendiste, amor?
Ella le odiaba… lo odiaba sólo por ser incapaz de dejar de amarlo.

Mi corazón está mutilado hasta las venas
Y yo continúo cerrándolo
Y tú me cortas, lo abres y yo…
Sigo sangrando, sigo sangrando…
Amor.

4 comentarios:

joli cullen dijo...

HOLA OLLE CADA CUANTO ACTUALIZAS ESTA HISOTRIA DISO ME ENCANTA

Anónimo dijo...

Wow!!! que intenso me encanto!!! Que buena historia y pinta para que se ponga aun mas intenso ^^Felicidades por tener una mente tan creativa

JeNNiiiFerR!!! dijo...

exelente, me encanta es ta historia espero que la sigan actualisando, y que siga así de buena como hasta ahora.

Anónimo dijo...

por favor sigue con la historia,esta buenisima.No nos dejes con la intriga y te felicito por tu gran imaginacion para crear historias.